Tras registrarse dos ataques contra Policías en Barranquilla y uno en Santa Rosa del Sur en Bolívar, que han dejado siete uniformados muertos, el Comandante de la Metropolitana de Cartagena, Brigadier General, Luis Poveda Zapata, ordenó reforzar las medidas de seguridad en todas las estaciones para frenar más acciones terroristas
A los agentes se les ordenó también no portar su uniforme cuando estén por fuera de sus labores; esta medida había sido implementada también en 2016 cuando el Clan del Golfo puso en marcha el denominado «Plan Pistola» que dejó tres agentes muertos en un ataque ocurrido cerca de la terminal de transportes de la ciudad.
Dijo el general Poveda Zapata, que es necesario tomar este tipo de medidas con el propósito de mostrar a los delincuentes que las autoridades están preparadas para contrarrestar sus acciones. En la ciudad se incrementaron los patrullajes motorizados.
El 9 de mayo de 2017, fue lanzado un artefacto explosivo contra la estación ubicada en el barrio El Pozón de Cartagena. Por este hecho fueron capturadas dos personas quienes según las autoridades hacían parte del Clan del Golfo. En ese mismo mes, solo una semana después, desconocidos atacaron El Cuartelillo de Olaya y como consecuencia, cuatro uniformados resultaron heridos.
En 2016 cinco uniformados de la policía fueron asesinados por el llamado Clan del Golfo en el departamento de Bolívar. De estos casos, tres ocurrieron en la zona sur oriental de Cartagena, uno en el municipio de San Jacinto del Cauca y otro en Santa Rosa de Lima.