Resulta muy triste decir, y además recordarlo, que el país está pasando por el mejor momento de resultados deportivos en toda su historia.
En los Juegos Deportivos Panamericanos, séptima posición, obtuvimos 84 medallas; en los Juegos Deportivos Parapanamericanos, 133 medallas, y ocupamos el cuarto lugar y además, fuimos triunfadores en los Juegos Deportivos Mundiales de Playa.
Sin entrar a definir cuál de los triunfos es el más importante, miremos el triunfo de Egan Bernal, de Zipaquirá, el tercer ganador más joven de la historia del Tour de Francia; sigamos con Juan Sebastián Cabal y Robert Farah, caleños que ganaron el Gran Slam en Wimbledon y son ahora los números uno en el ranking de ATP; Anthony Zambrano, Guajiro radicado en Barranquilla fue recientemente plata en los 400 metros planos en el mundial de atletismo en Doha, Catar, y además, el equipo de Colombia quedó de cuarto en la posta de 4 por 400 metros, equipo que estuvo conformado por Anthony Zambrano, John Perlaza, Diego Palomeque y John Solís.
¿Y qué decir del fenomenal jugador de béisbol de los Yankees de Nueva York, Giovanny Urshela, con sus grandes atrapadas, buen bateo y sus jonrones? ¿o de Sara López, la pereirana campeona mundial de tiro en Arco Compuesto logrado en Moscú?; ¿y de la selección Colombia de Bowling campeón mundial femenino en las Vegas, EEUU, y la selección Colombia de Rugby masculino subacuática?
Todo lo anterior es para resaltar la importancia de nuestros deportistas que estarán en las Justas deportivas más importantes de nuestro país como son los Juegos Deportivos Nacionales y Paranacionales, que estando a escasos 30 días de su inauguración es una incógnita cual es la sede, ¿si es Cartagena o es Departamento de Bolívar? ¿o donde se reúne el Comité Organizador en Bogotá?
Estamos a punto de ser los mejores Juegos Deportivos Nacionales y Paranacionales por todas esas estrellas deportivas de talla internacional que vienen de otros departamentos, y que ante esta constelación de estrellas tendremos que sacar alfombra roja para ver a una Catherine Ibarguen, a un Antoni Zambrano, a un Juberjen Martínez, o a Alex Cuajavante, Sara López, y muchos más atletas que a punto de disciplina y sacrificios han salido adelante cumpliendo sus sueños, y los cuales ponen al Ministerio del Deporte en un gran reto que a partir del año 2020 tendrá que la obligación de demostrar que su política pública deportiva servirá para dar más y mejores atletas de altos logros.
Ojalá que, en esta recta final, a punto de iniciarse las Justas no se nos venga encima lo que ya parece ser un “pandemonio” que embarga a estos Juegos Nacionales, especialmente en cuanto a lo referido a los escenarios deportivos, los cuales han sido el motivo para que las últimas cuatro celebraciones de Juegos Nacionales, se vean empañadas ante el hallazgo de sobre costos y actos de corrupción por parte de los gobernantes de turno.
Los Juegos Deportivos Nacionales son del Estado, no son juegos personales ni particulares; y según la Carta Magna de estos Juegos, Coldeportes, ahora el Ministerio del Deporte los organiza; y en cuya organización concurren, para este caso, la alcaldía de Cartagena y la gobernación de Bolívar pero esta vez además de Coldeportes está el departamento de Bolívar, y sobre ellos recaerá el éxito o el fracaso por parte de una Organización caracterizada por improvisaciones, falta de planificación y promoción, así como falta de una Sede de fácil y libre acceso donde se encuentre información, todavía no se conoce como van hacer las medallas, y vemos al ministro, que no sabe para dónde coger si para donde el alcalde de Cartagena o para donde el gobernador.
Ojalá, por el bien del deporte, de la ciudad y el departamento, el certamen sea todo un éxito; ojalá.