Los cambios que se vienen dentro de la próxima década obedecen a una agenda tecnocrática que busca implementar un modelo social que ha sido pensado para el control global. El Foro Económico Mundial, en compañía de algunas organizaciones internacionales, ha diseñado un proyecto denominado: la Cuarta Revolución Industrial, el cual, entre sus objetivos, plantea el transhumanismo, la implantación de chips y el acceso a los pensamientos de la persona.
El economista alemán, Klaus Schwab, fundador y presidente del Foro Económico Mundial, desde hace un tiempo viene promoviendo su idea del Gran Reinicio Mundial, en la que plantea reestructurar la vida de las personas en los diferentes campos en los cuales se desenvuelven. En la página de Internet del FEM se encuentra expresamente el desarrollo de este proyecto, respecto del cual, el mismo Schwab sostiene que la crisis del COVID-19 es un momento propicio para impulsar ese propósito. En sus palabras: “[l]a pandemia representa una oportunidad, inusual y reducida, para reflexionar, reimaginar y reiniciar nuestro mundo y forjar un futuro más sano, más equitativo y más próspero”.
El proyecto de Schwab encierra propuestas deconstructivistas y muestra sus intenciones a través de la llamada Cuarta Revolución Industrial, que es la estrategia planteada por el economista alemán para ejecutar su proyecto de Gran Reinicio. Aunque todo suene ficticio, es una realidad que se viene presentando y que es posible constatarla con los discursos de Schwab y con las publicaciones que realiza el FEM.
Dentro de la página del FEM puede encontrarse un video que expone las ocho predicciones para el 2030, entre las cuales se encuentran: que Estados Unidos ya no seguirá siendo la superpotencia mundial; que el reemplazo de órganos podrá hacerse con órganos impresos; que algunas encomiendas serán entregadas por drones; y que las personas deberán disminuir el consumo de carne, pues ese hábito deberá ser un placer ocasional.
Esta agenda tecnocrática es patrocinada por varias organizaciones, entre las cuales se encuentran: la fundación Rockefeller, Open Society Foundations, las Naciones Unidas y la fundación Bill y Melinda Gates. Así, no parece ser coincidencia que el slogan de campaña presidencial de Joe Biden fuera “Bild Back Better”, el mismo slogan usado por el FEM en algunos eventos. Tampoco parece ser coincidencia el discurso usado por algunos grupos radicales americanos y por algunos líderes políticos como, Alexandria Ocasio Cortez, quienes hablan de “reimaginar” a la sociedad, especialmente a las fuerzas del orden.
Por otra parte, el discurso de “reimaginar” el mundo también involucra la comercialización del carbono. Para desarrollar esta idea, se plantea un nuevo concepto de agricultura. Según la física y filósofa india, Vandana Shiva, se busca dejar de promover la agricultura orgánica y regenerativa, con el fin de crear un sistema de “agricultura natural”, dentro del cual, el Estado recibiría préstamos que serían distribuidos entre los agricultores, a quienes no se les pagaría por sus cultivos, sino por la tasa de carbono que produzcan sus tierras.
De igual forma, Schwab asegura que la Cuarta Revolución Industrial debe caracterizarse por el transhumanismo, es decir, por la fusión de nuestra identidad física con la tecnología, lo cual implicará, entre otras novedades, la incorporación de chips que podrán leer los pensamientos de las personas. Parece que la lucha por las libertades individuales tendrá cada vez más lugar en el escenario de la tecnología.