El Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, advirtió en un reciente informe que cuando se abusa del consumo del ibuprofeno puede causar complicaciones en la salud, como infartos y mayores posibilidades de sangrado entre las personas que lo combinan con la ingesta de algún anticoagulante oral, así como riesgos a las mujeres embarazadas o quienes sufren de los riñones o las úlceras.
El ibuprofeno recetado se usa para aliviar el dolor, la inflamación y la rigidez ocasionados por la osteoartritis (artritis causada por el desgaste del revestimiento de las articulaciones), y la artritis reumatoide (artritis causada por la inflamación del revestimiento de las articulaciones).
El medicamento puede servir para aliviar el dolor de leve o moderado, incluido el dolor menstrual. Es de venta libre y ayuda reducir la fiebre y aliviar los dolores menores por de cefalea, dolor muscular, resfriado común, dolor de muelas y dolor de espalda.
El docente de la Universidad Nacional y doctor en ciencias farmacéuticas, José Julián López, asegura que el consumo excesivo de este medicamento puede ser dañino a largo plazo para la salud.
“En el caso de las personas que son adictas a los analgésicos, personas con condiciones de inflamaciones crónicas como artritis reumatoidea o artrosis, que requieren un tratamiento diario por largos periodos de tiempo, pueden empezar a manifestar riesgos como fallo en el riñón o en el hígado”, advirtió.
El especialista asegura que los médicos son quienes deben definir cuándo y cómo tomar los medicamentos, pues “se pueden formar coágulos dentro del vaso sanguíneo y riesgo de infarto e ictus, que es lo que la gente normalmente conoce como trombosis o accidente cerebral, entonces todos esos riesgos dependen más de la dosis y del tiempo que se lleve consumiendo este medicamento”.
Considerando que el ibuprofeno es el medicamento más consumido en Colombia, el médico recomienda observar qué tipo de dolor siente el paciente, “cuando es un dolor agudo, que se presenta por ejemplo con algún tipo de traumatismo o con una cirugía, o en el caso de una persona tiene una artritis reumatoidea, tendrá que tomar el medicamento de por vida, pero como es tan fácil de comercializar, en ocasiones se utiliza por personas que no tienen la necesidad de tomarlo, como por ejemplo si se cae o se raspa la rodilla o hay un simple dolor de cabeza”.
Ingerir ibuprofeno no debe convertirse en un hábito y siempre hay que buscar la razón de fondo de la dolencia para tratar de hallar una solución con nuestro médico.