Mientras la ex reina Jeymmy Paola Vargas enfrenta denuncias por una certificación académica falsa y un contrato millonario con el IPCC, la Alcaldía en cabeza de Dumek Turbay guarda silencio y los medios nacionales omiten el caso. ¿Coincidencia o censura encubierta?
Cartagena huele a silencio. No es el de la brisa ni el del mar, sino el silencio pactado entre poder, belleza y prensa. Una ex reina con un título falso, un contrato millonario y una Alcaldía que calla mientras los medios de comunicación miran hacia otro lado. El escándalo de Jeymmy Paola Vargas Gómez no solo desnuda un posible fraude dentro del Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena IPCC, sino que exhibe el precio del silencio mediático en una ciudad donde la pauta publicitaria y las Ordenes de Prestación de Servicio (OPS) parece valer más que la verdad.
El pasado 10 de octubre del año en curso, en el Portal 724 Noticias, develamos una noticia escandalosa: inconsistencias en el pago de los honorarios y una certificación académica falsa en la hoja de vida que presentara la ex reina, modelo y actriz Jeymmy Paola Vargas Gómez para el Contrato CPS-IPCC-0116-2025 con el IPCC, dirigido por Carmen Lucy Espinosa Díaz (leer ‘Ex reina y Actriz Jeymmy Paola Vargas, en escándalo de corrupción por millonario contrato con ‘Acta de Certificación’ Falsa’).
Cuatro días más tarde, ante el mutismo de la Alcaldía de Cartagena, de la prensa local y nacional, volvimos a publicar una nueva columna ‘Silencio mediático: el caso que pone en jaque al IPCC’. El golpe fue duro. No se lo esperaban, tanto que las publicaciones del IPCC en redes sociales mostrando a Jeymmy Paola trabajando en los ensayos con las reinas populares no se hicieron esperar. Supongo que para lavarle la cara y dar la impresión a la ciudadanía de que nada pasaba.
Jeymmy Paola tampoco se quedó atrás. Desde su perfil en Instagram, divulgó una fotografía con el abogado penalista Enrique Del Río González, quien fuera contratista de la Alcaldía de Cartagena entre enero y septiembre de este año (Contrato No. CD-OAJ-0551-2025). Habrá que recordarle y pedirle el favor a la ex reina que, en vez de andar realizando publicaciones inanes, le dé una explicación a toda Colombia acerca de la certificación académica falsa en su hoja de vida, ya que, Del Río González, en calidad de amigo o asesor jurídico (directo o indirecto), ciertamente no podrá desaparecer ese grave hecho, el cual ya investigan los entes de control y judiciales.
Que medios cartageneros no le hayan hecho eco a una noticia de estas dimensiones no sorprende, ya que muchos de ellos parecen tener una mordaza que vendría en forma de OPS o pauta publicitaria. Pero que esto también suceda a nivel nacional cobra mucha más relevancia.
El pasado 16Oct2025, la W Radio reportó un caso muy similar al de Jeymmy Paola. Se trata de la candidata a viceministra de juventudes del Ministerio de la Igualdad del gobierno Petro. La publicación en la red social ‘X’ informaba que «la Fiscalía abrió una noticia criminal contra Juliana Guerrero y los directivos de la Fundación Universitaria San José por los delitos de fraude procesal, falsedad en documento y falsedad personal, debido a la presunta obtención irregular de su título universitario. La Fiscalía 42 Especializada de Bogotá será la encargada de adelantar la investigación por estos presuntos delitos».
Al día siguiente, 17Oct2025, en el programa radial ‘Al Oído’ de la W Radio, la periodista Catalina Suárez ventiló nuevamente la noticia. Algunos pudieran argumentar que es porque el caso de Juliana Guerrero es de interés nacional. Pues no. El 21Oct2021, la W Radio difundió un suceso también comparable con el de Jeymmy. La noticia fue documentada de la siguiente manera (leer ‘Fiscalía imputa cargos a la exprimera dama de Cartagena Cynthia Pérez Amador’):
«[…] Pérez Amador es procesada por haber presentado documentación falsa al momento de haber sido contratada como asesora del alcalde William Dau, lo que le generó un escándalo a ese gobierno en 2020 porque una de sus principales banderas es la lucha contra la corrupción.
Hasta ahora se ha hablado de dos documentos falsos en este proceso contra Pérez: un certificado laboral que aportó a su hoja de vida como experiencia y el certificado de la Corporación Universitaria Regional del Caribe (IAFIC) de tecnóloga en administración de empresas que, según el mismo rector de esa institución, no es real […]».
Por otra parte, el 27Ago2025, el periodista Christiam Zabaleta de Pluralidad Z nos dio indicios de por dónde le entraría el agua al coco respecto a la tan selectiva manera cómo el director de la W Radio, Julio Sánchez Cristo, escogería las noticias a presentar. Pues bien, Zabaleta reveló que la empresa Company Media habría contratado 197 cuñas publicitarias con tres emisoras, entre las que estaba la W Radio, a la cual le asignaron 147 de ellas (leer ‘1.430 millones cuesta manejo de imagen del alcalde de Cartagena’).
Si la omisión por parte de un medio como la W Radio del acontecimiento protagonizado por la ex reina no se debe al temor a perder la millonaria pauta publicitaria, a muchos nos gustaría que Julio Sánchez —quien se ufana de haber sido galardonado múltiples veces por su labor como periodista— nos aclare qué lo tiene tan callado. ¿Por qué sí con los casos de Juliana Guerrero y Cynthia Pérez y con el de Jeymmy Paola Vargas no? Ojalá no haya necesidad de usar el remoquete con el que se le conoce: ‘Julito no me cuelgue’.
Pero hay un hecho casi que providencial: desde el 2024, Cynthia Pérez Amador —la que fuera apartada fulminantemente de su cargo por el exalcalde William Dau Chamat tras el escándalo— hoy hace parte de la administración del alcalde Dumek Turbay, quien tiene numerosas denuncias por presuntos actos de corrupción. Dice un refrán que dizque «los burros se buscan pa’ rascarse».
El alcalde Turbay y Carmen Lucy Espinosa saben que ya hay una denuncia en la Fiscalía en contra de Jeymmy Paola Vargas. No sé qué esperan para terminarle el contrato con el IPCC. Me dicen que aparentemente ya eso sucedió. Si esto es cierto, el hermetismo continúa, lo que dejaría en evidencia un comportamiento ya conocido del equipo de comunicación del Palacio de la Aduana: hacerse los de la vista gorda frente a los temas álgidos que den mala imagen al narcisista alcalde Cartagena.
Los episodios de la ex reina, el de la contratista Fany Pachón Rodríguez y el de los contratos con anomalías denunciados por mí dan pie para hipotetizar que no serían casos aislados dentro de la administración Turbay. Y lo triste de toda esta situación no solo sería estar en presencia de posibles actos de corrupción institucionalizados, o aguantarse la ya sabida lentitud con la que típicamente opera la justicia colombiana, o las altas tasas de impunidad de las denuncias, sino que el periodismo, llamado el cuarto poder, esté como decía mi abuela: «igual a las demás chancletas».
Si en Cartagena seguimos premiando el engaño y castigando la verdad, el problema no será de las reinas ni de los contratos, sino de una ciudadanía que aplaude a quien la estafa y calla ante quien la informa.
La ex reina podrá borrar publicaciones, el IPCC podrá maquillar comunicados, y los medios podrán fingir que nada pasó. Pero los hechos —como la justicia— siempre encuentran su momento y cuando eso ocurra, más de uno querrá gritar “¡Julito, no me cuelgues!”… pero será demasiado tarde.



