La pasión futbolera se salió de control. Un bus de Transcaribe fue atacado con piedras por un grupo de hinchas del Real Cartagena, luego de la suspensión temporal del encuentro frente a Real Cundinamarca, por la tercera fecha de los cuadrangulares semifinales del Torneo BetPlay Dimayor.
El hecho ocurrió sobre la Avenida Pedro de Heredia, a la altura del Estadio Jaime Morón León, donde cientos de hinchas salieron del escenario deportivo visiblemente molestos tras la interrupción del partido que marchaba empatado. Según versiones, a las afueras del Estadio se desató una riña entre barras rivales, que terminó extendiéndose hacia la vía principal, en medio de la confusión y la euforia. Ya en el interior del Estadio había comenzado en enfrentamiento y hubo la necesidad de disuadir con gases lacrimógenos.
Un bus articulado de Transcaribe que pasaba por la zona se convirtió en blanco del ataque. Varias piedras fueron lanzadas contra el vehículo, provocando momentos de terror entre los pasajeros, que grabaron parte de los hechos con sus celulares. En uno de los videos difundidos en redes y medios locales, se observa el pánico dentro del bus mientras estallan los vidrios. Una persona resultó herida durante el ataque.
Tras el hecho, las autoridades iniciaron un operativo para controlar la situación y evitar nuevos disturbios. El incidente ha reavivado el debate sobre la seguridad en los alrededores del estadio Jaime Morón, especialmente en días de alta afluencia durante eventos deportivos y las Fiestas de Independencia.
La violencia en el fútbol vuelve a empañar una jornada festiva en la ciudad. En redes, ciudadanos rechazan los actos vandálicos y piden sanciones ejemplares contra los responsables, mientras otros cuestionan el manejo del orden público durante las celebraciones de noviembre.



