En una operación conjunta, el Grupo GAULA de la Policía Nacional en Caldas, en colaboración con funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), realizó una diligencia de registro y allanamiento en el patio No. 3 del centro penitenciario Doña Juana de la Dorada.
El objetivo principal de esta intervención fue desmantelar redes de extorsión que delinquían desde el interior de la prisión, así como incautar elementos materiales de prueba que pudieran esclarecer delitos en curso.
La modalidad delictiva descubierta involucraba a delincuentes que continuaban perpetrando actividades ilícitas desde el corazón mismo del centro de reclusión, para obtener dinero a través de intimidaciones y amenazas dirigidas a víctimas en diversas ciudades del país.
Durante la operación, se registraron 82 celdas del mencionado patio, revelando la existencia de caletas improvisadas en diversas superficies, desde pasamanos hasta colchones y paredes. En estos escondites se encontraron 38 teléfonos celulares de distintas marcas y modelos, así como 47 tarjetas SIM, 47 baterías para dispositivos móviles, 19 cargadores, 8 manos libres, estupefacientes y tres cuadernos con posibles datos de víctimas.
La acción policial ha evitado la materialización de llamadas extorsivas y amenazas, devolviendo la tranquilidad a varios ciudadanos que estaban siendo afectados por estas actividades delictivas.