Aunque el acceso digital a los servicios financieros crece a pasos acelerados, Colombia sigue dependiendo del efectivo: casi el 80% de las transacciones aún se realizan con billetes y monedas, según cifras del Banco de la República. Este panorama ubica al país entre los cinco con mayor circulación de efectivo en Latinoamérica, junto con Bolivia, Ecuador, Perú y México.
De acuerdo con la Superintendencia Financiera, al cierre de 2024 el 96,3% de los adultos colombianos tenía al menos un producto de depósito o crédito, lo que evidencia un crecimiento notable frente a años anteriores. A nivel regional, un estudio de Mastercard y Payments and Commerce Market Intelligence señala que la titularidad de cuentas pasó de 55% en 2017 a más del 80% en 2021, impulsada por la digitalización, la expansión de internet y el auge de las fintech.
Los pagos digitales también muestran avances: tarjetas débito y crédito siguen liderando, pero el uso de cuentas digitales y pagos con código QR gana terreno con rapidez, especialmente entre los jóvenes.
Para Galileo Financial Technologies, empresa global de tecnología financiera, Colombia ha entrado en una “segunda fase de inclusión financiera”, caracterizada por la adopción de soluciones digitales más sofisticadas que van más allá de la simple bancarización.
“El crecimiento de las apps móviles confirma que los usuarios están listos para reducir su dependencia del efectivo y adoptar servicios digitales de mayor valor como préstamos en línea, esquemas de compra ahora y paga después, cuentas en moneda extranjera e incluso criptomonedas”, afirmó Abdul Assal, director de desarrollo de negocio para Brasil y Colombia en Galileo.
El Finnovista Fintech Radar Colombia 2025, realizado por Finnosummit en alianza con Mastercard y Galileo, revela que el país cuenta con más de 400 fintech activas, un ecosistema que triplicó sus ingresos promedio en los últimos cuatro años y que podría duplicarlos nuevamente antes de 2027.
Gracias a estas empresas, millones de colombianos accedieron por primera vez a tarjetas de débito, cuentas digitales o pagos con QR, superando barreras históricas como las altas comisiones bancarias y la desconfianza en la banca tradicional. En el ámbito corporativo, las fintech han dinamizado el crédito con modelos de lending digital, convirtiéndose en un motor para la economía empresarial y nacional.
- El desafío: eliminar el efectivo de la economía
Aunque los avances son claros, expertos advierten que el gran reto está en reducir el uso del efectivo. Para lograrlo, las fintech y el sistema financiero deberán:
- Diversificar sus fuentes de ingresos.
- Ofrecer productos de mayor valor agregado como seguros y préstamos digitales.
- Mejorar la gestión de datos financieros.
- Impulsar alianzas estratégicas entre bancos y fintech.
- Aprovechar el poder de la Inteligencia Artificial para ofrecer experiencias seguras y personalizadas.



