La supuesta fundación de Cartagena de Indias no tiene acto fundacional, no existe. Según el cronista Juan de Castellanos, fue el 20 de enero de 1533, pero según el cronista oficial de Indias Gonzalo Fernández de Oviedo y amigo personal de Heredia, fue el 1 de junio de 1533.
Fundó a Cartagena de Indias en el mismo sitio en que los aborígenes caribes habían levantado un poblado llamado Calamarí, que en lengua indígena significa cangrejo, crustáceo que proliferaba por entonces en aquellas tierras, hoy sabemos que el nombre no era calamari sino carmairi y que su nombre no tiene que ver con los crustáceos, la palabra significa hombre de mar y tierra.
Según afirma el historiador Francisco Muñoz en uno de sus libros, Pedro De Heredia no era más que un asesino despiadado que llegó a la ciudad para acabar con su gente. El autor del libro ‘Cartagena de Indias: compilación histórica’ (2012) añade que el papel del ‘fundador’ fue aplacar a los pobladores nativos de la zona que se oponían al desembarco español en sus tierras. Era un ‘noble’ que cayó en desgracia por su vida azarosa. Todavía no queda claro si llegó huyendo o si España fue la que lo envió hacia el ‘nuevo mundo’ como lo hizo con otros delincuentes que así conmutaban sus penas.
Casi cinco siglos después, hemos pasado por muchos altos y bajos, pero somos una ciudad tan rica que aguantamos todos los saqueos. La clase política, que carece de sentido de pertenencia y muchos desconocen nuestra historia, el sector privado, un gremio que aun en esta fecha siente ser noble y arraigado a la actitud del conquistador, evade el pago de impuestos, pasando de agache para pasar por alto la obligación que por ley tiene con la ciudad. Esta también es una forma de saqueo, o el cartagenero de a pie que con su falta de cultura ciudadana hoy nos convierte en un basurero lineal. Basta con hacer un recorrido por la única avenida que tenemos y ver cuál es el estado de la ciudad.
A pesar de los esfuerzos de las autoridades locales para implementar programas de reciclaje y limpieza, la falta de conciencia ambiental de algunos ciudadanos sigue siendo un obstáculo. Es importante que todos tomemos conciencia de la importancia de mantener limpio nuestro entorno y contribuir a la conservación del medio ambiente.
Otro problema que afecta a la capital de Bolívar es la inseguridad. A pesar de los esfuerzos de las autoridades para combatir la delincuencia, la ciudad sigue siendo vulnerable a robos, asaltos, sicariatos y muchas otras manifestaciones de crimen, especialmente en zonas turísticas. Aunque se están haciendo esfuerzos y hoy vemos un aumento en la presencia policial para garantizar la seguridad de propios y visitantes, aún queda mucho por hacer para mejorar la situación. Es fundamental que se implementen políticas efectivas para combatir la delincuencia y garantizar la seguridad de todos los habitantes de la ciudad.
La pobreza es otro problema que afecta a Cartagena de Indias, especialmente en las zonas más marginales de la ciudad. A pesar de ser un importante destino turístico, muchas personas viven en condiciones precarias, sin acceso a servicios básicos como agua potable y electricidad.
Durante el cumpleaños de Cartagena, es importante recordar que no todos los habitantes de la ciudad pueden disfrutar de las festividades, y que es necesario trabajar juntos para combatir la pobreza y la desigualdad.
En conclusión, el cumpleaños de Cartagena de Indias es una celebración importante que nos permite recordar la historia y la cultura de esta hermosa ciudad. Sin embargo, también es una oportunidad para reflexionar sobre los problemas que aún persisten, como las basuras, la inseguridad y la pobreza. Es responsabilidad de todos trabajar juntos para superar estos desafíos y construir un futuro mejor para Cartagena y sus habitantes. ¡Feliz cumpleaños, Cartagena!»