La Auditoría General de la República solicitada por el alcalde de Cartagena de Indias William Dau contra el Contralor Distrital, Freddy Quintero Morales, con relación a la suspensión del cargo de la Secretaria General de la Alcaldía, Diana Martínez Berrocal, no arrojó resultado a favor del mandatario.
Se estableció que “no es procedente predicar arbitrariedad en la decisión de suspensión, pues la misma se encuentra adecuada a los fines de la norma que autoriza el ejercicio de dicha facultad, y guarda proporcionalidad con los hechos que le sirvieron de causa, al considerar que, al ser la Dirección de Talento Humano el área encargada de la suscripción del contrato de prestación de servicios y apoyo a la gestión, una dependencia de la Secretaría General, la persona que ejerce este cargo podría -como jefe inmediato – presuntamente afectar la investigación o eventualmente comprometer todavía más el patrimonio del Distrito”. Como quien dice las quejas del Alcalde Dau, solo fueron berrinches de un alcalde que cualquier bus le sirve porque no sabe para dónde va.
Jackeline Perea calienta las redes sociales
La dirigente social Jackeline Perea Blanco sigue con pulso firme denunciando las malas actuaciones del alcalde de Cartagena de Indias, William Dau Chamat. En las últimas horas reveló un audio que compromete al mandatario con la entrega de varios cheques por 5 millones de pesos a dirigentes comunales. El nuevo escándalo ya es voz pupuli y el gobierno mantiene silencio ante el delicado tema. ¿Será que así es que se están gastando el presupuesto que no se ejecutó a tiempo? A los comunales les llegó el billetico a sus cuentas personales, algunos no tenían y salieron corriendo a abrirlas. Sería bueno que mostrarán a la opinión pública el listado de las JAC beneficiadas y bajo que concepto se giraron esos cheques que según las indicaciones deben ser gastados antes del 30 de diciembre. ¿Será que están pagando favores políticos?
¿Y el billete que devolvieron de dónde salió?
La oficina de prensa del alcalde de Cartagena William Dau Chamat, emitió un comunicado sobre el dinero que se le devolvió a la Contraloría por el caso de la Ex Primera Dama Distrital, Cinthya Pérez Amador.
Se consignaron 42.200 millones de pesos que según el escueto comunicado fueron producto de una “vaca”, es decir una recolecta, -no se sabe quiénes aportaron- para subsanar el detrimento y solicitar el regreso de la súper Secretaria General Diana Martínez Berrocal.
La historia de este novelón que se inventó el mismo alcalde Dau cuando decidió nombrarla Primera Dama y pagarle honorarios de más de 7 millones de pesos mensuales, continúa. Aún falta establecer quienes, y de cuanto fue el aporte, no sea que la plática haya salido de algún contratista que quiere asegurar por la vía rápida algo.
Múnera tiene los días contados en el Gobierno Dau.
Dicho por el mismo funcionario, estará en el gobierno de Dau hasta enero de 2021. Esto lo afirmó en una reunión con sindicalistas del Cuerpo de Bomberos, donde se estaba manejando al parecer por debajo de la mesa algunas vacantes, audio que escandalizó a la ciudad por la forma como se repartían tres puestos. Bueno dos, porque ya uno lo había pedido el alcalde, tal como se escucha en el audio que se volvió viral y deja entrever un tráfico de influencias.
David Múnera Cavadía, antes de ser parte de esta nefasta administración que con un tractor desincronizado comenzó tildando al bueno y al malo de malandrines, ratas, hijueputas, malparidos y hasta mas… gozaba de gran credibilidad por su claridad sobre la forma de regir los destinos de una ciudad tan importante como Cartagena de Indias. Era asediado por los medios de comunicación por aquello de sus buenos pronunciamientos. ¿Qué pasó con esa figura pública que inclusive gustaba para alcalde? Yo creo que ese terreno abonado se perdió. ¿A propósito cuál es su balance en la secretaría del interior? ¿Qué habría opinado Múnera si estuviera fuera del gobierno?
¿De quién es la responsabilidad si colapsa la red hospitalaria en Cartagena?
Se ha dicho por parte de la mesa de salud de Cartagena y Bolívar que las medidas tomadas por el gobierno de William Dau para contener la expansión del Covid-19, “son pañitos de agua tibia” que de nada sirven. Las cifras son alarmantes la curva va en ascenso y en enero podría colapsar la red hospitalaria. El número de muertos a la fecha va en más de 700 casos.
El gremio médico esta fatigado porque no ha parado desde que comenzó la pandemia y el gobierno de rumba. El alcalde ha sido sorprendido tomando cerveza y fumando sin ningún tipo de bioseguridad. Ahora autorizó el servicio de chivas turísticas que no es más que una rumba ambulante y como si fuera poco se siguen abriendo playas para atraer al turista. Como quien dice el Covid está de rumba por orden del alcalde.
- Espere mañana otra Zona de Candela