Según la Ley 1805 de 2016. Para ser donante, se puede expresar la voluntad verbalmente a la familia, diligenciar un formulario en el sitio web del Instituto Nacional de Salud (INS), o para oponerse, se debe presentar un acta notarial ante el INS. Expertos advierten que el país aún está lejos de alcanzar los estándares internacionales, aunque las cifras muestran una leve recuperación.
Cada 14 de octubre el mundo conmemora el Día Mundial de la Donación de Órganos, Tejidos y Trasplantes, una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que busca sensibilizar sobre la importancia de dar vida a través de la donación. En Colombia, la tasa actual es de 7.4 donantes por cada millón de habitantes, una cifra aún baja si se compara con España (52.6), Estados Unidos (48.1) y Argentina (19.9).
“Un trasplante significa volver a nacer. El impacto de la donación de órganos se multiplica en cada paciente trasplantado, ya que un solo donante puede beneficiar hasta a 55 personas y sus familias”, señala Boris Julián Pinto, profesor de la Universidad del Rosario.
Tras la pandemia, el número de donantes en Colombia cayó drásticamente. Según el Instituto Nacional de Salud (INS), en 2024 se registraron 7.4 donantes por millón de población, una leve mejora frente a 2023 (6.4), pero aún inferior a los 8.9 donantes registrados antes del COVID-19.
Durante 2024, el país realizó 1.357 trasplantes, mientras que en 2023 fueron 1.394. En los primeros cinco meses de 2025, ya se han efectuado 571 trasplantes. A corte del 4 de junio de 2025, 4.248 pacientes se encontraban en lista de espera, y 8.116 personas habían expresado formalmente su voluntad de donar sus órganos.
“El trasplante de órganos muchas veces es la única opción de vida. En Colombia debemos fortalecer la cultura de la donación y reducir las barreras que impiden salvar más vidas”, enfatiza Alejandro Niño Murcia, especialista en trasplantes de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud del Rosario.
Existen dos tipos de donantes: el donante vivo y el donante cadavérico. El primero puede donar riñón, hígado, intestino o pulmón; el segundo permite el trasplante de corazón, pulmones, hígado, músculo, hueso, piel o córneas.
Algunos órganos, como el corazón o los pulmones, requieren trasplante inmediato, mientras que en el caso del riñón, la diálisis puede servir como puente temporal.
En el marco de esta fecha, la Universidad del Rosario presenta el libro humano “Cuando la vida se comparte. Historias sobre la donación de órganos” (disponible aquí). Esta obra recoge testimonios reales de médicos, pacientes y familias que muestran cómo el dolor puede transformarse en esperanza.
“Este libro es un homenaje a quienes, al donar, multiplican la vida y la posibilidad de un mañana”, afirma Boris Julián Pinto, editor del documento.
El capítulo “Ecos familiares de la donación” narra más de dos décadas acompañando la enfermedad renal y el trasplante de su padre, mostrando cómo cada trasplante transforma no solo la vida del paciente, sino la de toda su familia.
La Biblioteca Humana de la Universidad del Rosario, lanzada en 2024, es una innovadora plataforma gratuita que reúne libros humanos, pódcast y documentales sobre experiencias reales. Inspirada en el proyecto danés “Human Library”, esta iniciativa del Centro de Recursos para el Aprendizaje e Investigación (CRAI) promueve una lectura viva, emocional y humana.
A través de historias auténticas, los usuarios pueden conectarse con experiencias transformadoras como la donación de órganos, comprendiendo que cada acto de generosidad puede cambiar decenas de vidas.



