Los sentimientos, pasiones, razones y opciones enfrentadas, la violencia verbal, el fanatismo y el atentado, no han impedido las manifestaciones multitudinarias, ni las intensas campañas de Senado y Cámara. Pasando por encima de las agresiones, incertidumbre y el miedo, la participación ciudadana demostrará qué tanto ha crecido la democracia en el país.
El reto es superar el 43% de votantes de 2014, los 13.300.000 votos, a lo que puede contribuir la polarización, el desarme de las FARC, la pluralidad de candidatos y las consultas para la Presidencia entre la crecida y fracturada izquierda y una derecha incompleta que unirá mañana tres vertientes.
Si bien la elección es para Congreso, la consulta estimula el voto y si las encuestas no se equivocan, Gustavo Petro e Iván Duque la ganarán, los dos candidatos que con empate técnico lideran la intención de voto en la presidencial del 27 de mayo.
Aunque en los debates y temas de campaña no lo realzan, el voto por el sí y el no cohesiona a los ciudadanos y la postura ante la implementación del Acuerdo es dinamizador de las campañas.
Hay un país nuevo que irrumpió con voluntad de victoria; otro que, con ropaje renovado, pretende frenarlo y perpetuarse, imponiendo un modelo de dominación inequitativo e injusto, derrotable en las urnas y que hay que cambiarlo en el marco de la Constitución de 1991.
Es posible que la abstención gane mañana 11 de marzo y que caciques políticos se reelijan o elijan a sus hijos o esposas, pero el objetivo es derrotar con el voto libre el detestable clientelismo corruptor de las costumbres políticas. Hay que limpiar el Congreso de quienes han inoculado veneno en el sistema electoral y que, para reelegirse, enterraron las reformas electoral y política.
El voto de opinión es una realidad y si las autoridades y la Fiscalía cumplen, encarcelando al político corruptor del elector, será posible derrotar las aceitadas maquinarias.
Los partidos independientes y la ‘Lista de la decencia’ tienen un enorme reto: crecer y superar el umbral para que la derecha no se apodere de una mayor cantidad de curules en el Congreso y frene el avance democratizador, de ganar la izquierda la Presidencia en la segunda vuelta.
Porque amamos a Colombia y sé que para ellos la democracia es un medio y un fin, por el derecho a ganar la Presidencia, convoco en la consulta a votar por Gustavo Petro. Para el Senado lo haré por el gran músico y demócrata del Caribe, Francisco Zumaqué y a la Cámara votaré por Soraya Bayuelo, lideresa de los sobrevivientes de los Montes de María.
Seamos serios, el atentado en contra de Petro obliga a recordar que desde el magnicidio del Mariscal Sucre son muchas las frustraciones populares por los sucesivos crímenes políticos: Uribe Uribe, Gaitán, Galán, Pardo Leal, Álvaro Gómez, Bernardo Jaramillo, Carlos Pizarro, presidenciables todos.