El excandidato a la alcaldía de Cartagena de Indias, William García Tirado confirmó que no aceptará la curul que le otorga la ley de equilibrio de poderes para hacer oposición desde el Concejo Distrital bajo el argumento que “no creo que desde esa curul, se puedan gestar los procesos de trasformación de ciudad que requiere con urgencia la ciudad”.
Explicó que, “una posición en el Concejo no me permite contar con las herramientas necesarias para poder desarrollar las acciones programáticas que vengo diseñando para mejorar el nivel de vida de los cartageneros y progresar en el desarrollo sostenible de este Distrito; a la vez que sería, mi presencia allí, la excusa o caballito de batalla de William Dau Chamatt para justificar su ineficacia en el impacto de las problemáticas sociales que le corresponderá abordar; o para exonerarse de los inconvenientes de gobernabilidad y gobernanza que pueda padecer en mandato”.
Lamentó la manera sistemática como la Registraduría Nacional del Estado Civil y la comisión escrutadora han venido desatendiendo las reclamaciones electorales interpuestas por sus abogados.
“Así no se construye un país, los insto a que cumplan su deber legal y su obligación moral de dar trámite hasta el último reclamo”, señaló García Tirado.
Agregó que actuaciones como esa son las que destruyen la fe de la ciudadanía en las instituciones; e incrementan las sospechas sobre el certamen electoral, “como es apenas lógico y natural, ninguna elección se puede declarar en nuestro país, sin antes haber resuelto el total de todos los recursos y reclamaciones de los demás candidatos”.
De manera enérgica indicó también que “si así lo hacen ahora, (y quieren hacerlo)- en su afán de terminar de consumar esta gran estafa electoral, esa elección adolecerá de vicios de procedimiento que pueden generar su anulación, con lo que se sometería otra vez a Cartagena a un periodo de intermitencia y de gobernantes encargados; lo que no nos hará ningún bien, y retrasará todavía más el abordaje serio y con gobernanza de las problemáticas locales”.
Manifestó asimismo que “la Fiscalía General de la Nación ya tiene conocimiento del fraude electoral del que se ha hecho víctima no solo a mí, sino a todo el pueblo cartagenero, y ya adelanta las investigaciones penales del caso en conjunto con el CTI, y tarde o temprano darán con los orquestadores de este gran engaño electoral; sin embargo sus pasos no son tan agigantados como los veloces saltos y celeridad con que se mueve la Comisión escrutadora; que violando el derecho al debido proceso, pretende a todas luces declarar elección sin haber siquiera resuelto el total de reclamaciones que aún se surten ante sus mesas; ante lo cual es de preguntarse; que les motiva a actuar con tal apresuramiento y vivacidad? ¿Porque sencillamente no resuelven las reclamaciones y los recursos aun en trámite y punto? ¿Que temen que se descubra?; no hay justificación alguna, pues, de todas maneras, el periodo solo comenzará el próximo 1 de enero. Un reducido grupo de personas no pueden burlarse olímpica y descaradamente de la voluntad popular; y como en tiempos de la colonia, someternos a todos en este Distrito, a que reine quien a algunos les conviene”.
García Tirado, reiteró una vez más, que “espero lo mejor para nuestra ciudad y sus pobladores; que puedan encauzarse hacia una estabilidad institucional y de gobernabilidad; con armonía entre todas sus autoridades, y que genere las acciones que tan urgentemente requieren los infantes, juventudes en riesgo, madres cabezas de hogar, y adultos mayores, la seguridad, la salud, la educación y el desempleo local que no da más espera. Pero, no es de hacerse falsas e ilusas esperanzas”.
Expresó que la ciudad no está para más experimentos, ni improvisaciones de gobernantes que no lleguen ni con experiencia en el sector público, ni preparados para el cargo, “no creo que un programa de gobierno de tres páginas sean la carta de navegación que Cartagena se merezca, ni es la solución; ello es un salto al vacío, que caerá por su propio peso; deslegitimado desde sus inicios por el fraude con que se gestó”.
García y su grupo de juristas siguen atentos a los procesos que surten en la Fiscalía y la Procuraduría para dar por probado este fraude electoral, “pueden estar tranquilos en que no dejaremos de agotar todas las instancias legales necesarias para que se clarifique este turbio fraude”, dijo.