Su pasión por el béisbol, lo llevó muy temprano a abrazar la causa del equipo “Torices”, su formación académica le permitió tener una visión clara de su ciudad, Cartagena de Indias, su huella es recordada en los diferentes cargos públicos que ocupó.
Pedro Fabris Anichiriaco, murió en la ciudad que lo vio nacer, en el tradicional y popular barrio “Torices”, luego de la llegada de su familia procedente por la vía materna del departamento del Magdalena.
Con el apoyo de sus progenitores comenzó sus estudios básicos (primaria y bachillerato) en diferentes instituciones, hasta alcanzar años más tarde el título de Ingeniero Civil, egresado de la muy prestigiosa, Universidad de Cartagena
En sus años mozos, como la mayoría de los jóvenes de su generación, se dedicó a jugar béisbol en los campos abiertos de la época, le gustaba jugar en la tercera base, luego hizo su tránsito al softbol recreativo.
Pedro Fabris Anichiriaco, en compañía de Joaquín de León, Francisco Casas Vargas, los hermanos, Jorge y Edgardo Payares Bossa, “Tito Quintero”, Carlos Roque García, Oscar Corrales, Kalil, Michel y Edmon Barbur, entre otros, conformaban la “Guardia Pretoriana” de la Dra. Iveth Chejuán, del equipo “Torices” en la segunda etapa del béisbol profesional colombiano, desde 1979 hasta 1984.
El grupo de amigos se destacaban por su presencia en los estadios de Barranquilla y Cartagena, acompañando a su “Torices del Alma” además de estar antes de la temporada escudriñando las informaciones que esa entonces aparecían en la revista “Baseball America”, para armar un “Trabuco” que compitiera con sus tradicionales rivales y compañeros de plaza, “Indios de Cartagena”.
Por su formación profesional, Pedro Fabris, priorizaba las estadísticas individuales de los jugadores a ser contratados, convirtiéndose en todo un experto en la materia, convenciendo, la mayoría de las veces a sus compañeros.
Años más tarde, en compañía de Nabil Baladi, Alfredo Castellón, Javier Marrugo, Oscar Brieva, Tito Quintero, Eugenio Baena y Curtis Wallace, se embarcaron en la aventura de tener a “Tigres “como el equipo representativo de Cartagena, recordando y añorando al tradicional equipo “Torices” los Tigres de la Loma del Diamante.
En una época, Pedro Fabris, en compañía de su colega y amigo, Francisco “Pacho Kike” Casas, sembraron las primeras semillas para la creación de la Liga de Patinaje de Bolívar, nombrando al periodista deportivo y propietario de “Droguería Cartagena” Marcos Molina Montes, como Presidente, las hijas del Ingeniero practicaron el entonces novedoso deporte.
El periodista referente del fútbol en Cartagena, Pedro Valdez, recuerda al Ingeniero y amigo personal, Pedro Fabris, como uno de los socios de la Corporación Deportiva Cartagena de Indias (Corpodeci), presidida por Héctor Flórez Sotomayor, que manejaron al Real Cartagena, en sus inicios.
El Ingeniero, Pedro Fabris, fue también un aficionado fiel al Real Cartagena, siempre acompañaba al equipo de su ciudad, en el antiguo estadio, Pedro de Heredia (Hoy Jaime Morón).
Luis Ballestas e Iván Castillo, señalan que Pedro Fabris fue un «billarista» de talla internacional, experto en carambola a tres bandas, en el «Dominó» se destacó también por su fuerte temperamento.
Mauricio Portnoy, amigo, compañero de estudio y vecino, lo recuerda: “fue un dirigente probo, transparente, integral, se destacó en los diferentes cargos que ocupó en la ciudad de Cartagena”.
Pedro Fabris trabajó en las Empresas Públicas Municipales de Cartagena, Puertos de Colombia, fue también durante muchos años Asesor de la Secretaria de Infraestructura de la Alcaldía de Cartagena de Indias.
En la administración del Dr. Carlos Díaz Redondo, se desempeñó en la oficina encargada de la Protección Costera, Secretario de Obras de la Recuperación de la Playas, el establecimiento de los espolones en Bocagrande en la época de Judith Pinedo, como Alcaldesa de Cartagena, al lado del Ingeniero Civil y Secretario de Infraestructura Distrital, Antonio Flórez.
Pedro Fabris, recibió el visto bueno de la empresa holandesa en encargada de la recuperación de la Bocana y en compañía del Dr. José Henrique Rizzo Pombo, le entregaron a Cartagena una mega obra de primera calidad, cuando ejerció como Secretario e Interventor General del Proyecto.
Pedro Fabris, partió de este mundo terrenal con la satisfacción del deber cumplido, su huella indeleble, en el béisbol y en la ciudad de Cartagena, con los diferentes cargos privados y públicos que ocupó es su legado más preciado.
Para el amigo apasionado por el béisbol, conocedor de las fortalezas y debilidades de Cartagena de Indias, este pequeño homenaje, seguramente se me escaparon detalles, su legado permanecerá por siempre.