Tras años de lucha y constantes llamados por parte de la comunidad, el acceso al agua potable en San Jacinto y San Juan Nepomuceno comienza a convertirse en una realidad. El gobernador de Bolívar, Yamil Arana Padauí, confirmó el inicio de las obras del acueducto regional, una inversión histórica cercana a los 20 mil millones de pesos, que busca solucionar el problema de abastecimiento de agua en estas localidades.
El acceso irregular al agua potable ha sido una de las mayores problemáticas en esta zona del departamento de Bolívar, especialmente en temporadas de sequía. Hasta ahora, el suministro era insuficiente, generando dificultades en la vida cotidiana de los habitantes. Sin embargo, con el inicio de las obras, se espera que la capacidad de distribución pase de 40 litros por segundo a 160 litros por segundo, garantizando una cobertura más amplia y eficiente.
Los trabajos ya comenzaron en San Jacinto, con la instalación de tuberías que alimentarán el tanque de San Abel a Miraflores. El proyecto contempla la construcción de nuevas redes de conducción de agua, tanques de almacenamiento, estaciones de bombeo, sistemas de postcloración y casetas de clorado, elementos clave para mejorar la calidad del servicio. Además, se realizarán conexiones domiciliarias en barrios como Las Muchilas, San José, Candelilla y Marbella, impactando directamente a cientos de familias.
El gobernador Arana Padauí reafirmó su compromiso con la ejecución y cumplimiento del proyecto: «San Jacinto tiene que tener agua. Es un compromiso de nuestro gobierno. Comenzamos la instalación de la tubería que alimenta el tanque de San Abel a Miraflores. Los trabajos en ejecución son para solucionar este problema histórico», expresó el mandatario.
Las comunidades beneficiadas estarán atentas al desarrollo de la obra, luego de años de frustración ante proyectos que no lograban concretarse. En esta ocasión, el gobierno departamental ha garantizado la supervisión y el cumplimiento de cada fase de ejecución, permitiendo a los ciudadanos hacer un seguimiento directo a los avances.
Con esta inversión, más de 21 mil personas en San Jacinto y San Juan Nepomuceno contarán con un servicio de agua potable más estable y seguro, representando un avance significativo en su calidad de vida. La obra no solo impactará en el bienestar de las familias, sino también en el desarrollo económico y social de la región.
El proyecto del acueducto regional se posiciona como una de las obras más importantes para Bolívar en los últimos años, marcando el inicio de una nueva etapa para estas comunidades que, por décadas, han esperado el acceso pleno a un derecho fundamental: el agua potable.