“Solo quien domina su lengua, es persona madura…”. Apóstol Santiago.
De lo advertido en el Proverbio, que “…el que es sabio refrena su lengua” parece que poco caso hacen muchos en Colombia, en especial, esos que dicen ser, o que llaman dizque “Padres de la Patria”; sin que del listado queden por fuera dirigentes del deporte, gente del gobierno, ex fiscales, y hasta ex presidentes.
El campeonato de las voces desobligantes se lo gana, sin duda, la actual senadora, María Fernanda Cabal, la misma que representa al Partido Centro Democrático en el Parlamento, esposa del ex vicecontralor José Félix Lafourie, el de los cuestionados manejos en Fedegán, y quien parece no dominar ese pequeño órgano a quién el apóstol Santiago definió como un fuego y un mundo de maldad capaz de incendiar un bosque, la lengua.
Dentro de sus más recientes voces desobligantes están sobre el tapete las dichas contra el prestigioso “New York Times” y Nick Casey, su periodista, quien se atrevió a denunciar la presunta reaparición de los asesinatos de civiles conocidos como “Falsos Positivos”.
De manera desobligante dijo la Senadora, “¿Y quién es El New York Times?…para mí no es nada respetable… es el rey de las fake news… y su periodista Nick Casey, pertenece a esa élite de izquierda que es más activista que periodista”. ¿Y qué decir de lo que también dijo esta Senadora el día que conocida la muerte de Gabo, lo mandó a juntarse con Fidel Castro en el infierno?
Pero Uribe, el mentor de la Cabal, no se queda atrás. ¿Qué tal aquella frase que en plena calentura por las “chuzadas” del DAS desafió a un periodista que telefónicamente lo interrogaba y a quien dijo: “Cuando lo vea, le voy a dar en la cara, marica”.
Palabreja que también usó el ex fiscal Néstor Humberto Martínez para burlarse del finado Jorge Enrique Pizano, cuando este le preguntó sobre los sobornos de Odebrecht, a lo que el entonces abogado del Grupo Aval y ahora el ex fiscal Martínez le dijo “…esto es una coima, marica”.
Pero volviendo con el ex presidente Uribe, ¿Qué tal cuando en pleno debate en el Sagrado Templo de la Democracia le repitió al senador Petro: “Sicario…Sicario…Sicario” y remató diciéndole “Yo prefiero 80 veces al guerrillero en armas que al sicariato moral difamando”.
¿Y qué tal la de otro del Centro Democrático, el ultraderechista José Obdulio Gaviria, quien para ofender a sus nuevos colegas del Congreso, los de la Farc, dijo: “Lo que sí debo decir es que llegó una gaminería al Senado…”
O la que en Cartagena, y también del Centro Democrático, y como si fuera Juez acaba de decir la ministra Alicia Arango Olmos contra Liliana del Carmen Campos Puello: “La Madame tiene que podrirse en la cárcel”.
Y las permanentes salidas en falso del también “ultra uribista”, Pachito Santos, sobre la crisis de Venezuela, cuando dijo: “…todas las opciones, incluso la incursión militar deben ser consideradas”; así como las de su copartidario y embajador en la OEA, Alejandro Ordóñez, cuando dijo sobre los inmigrantes venezolanos a Colombia: “…es una estrategia de Maduro fríamente calculada para irradiar en la región el socialismo del Siglo 21”.
Y cerramos con lo que acaba de decir contra las mujeres Guillermo Rivera, el del Partido Conservador: “…como administradoras me parecen funestas…el presidente de la república está encartado con tanta mujer que tiene como ministra…»; y las que también dijo el ex senador y dirigente deportivo Gabriel Camargo contra las Ligas Femeninas y las mujeres del fútbol: “Eso es un caldo de cultivo del lesbianismo…” y ellas son más ‘tomatragos’ que los hombres…”.