La semana pasada un colega me pidió una asesoría para convalidar el título de especialista en Brasil, al explicarle que para validar el título de especialista, debe antes homologar el título de médico general y luego validar la especialización. Para ello debes -le dije-presentar un examen de conocimientos básicos de medicina general, se desinfló.
-Juan, a estas alturas a mi ya se me olvidó que es una mitocondria y sólo recuerdo que el corazón bombea, el antibiótico que le aplico a mis pacientes, luego de operarlos. Si hay infecciones, solicito interconsulta al infectologista; caso disminuya la orina, al nefrólogo, y si veo a mi paciente ansioso, al psiquiatra.
Me lo dijo un tanto en Broma, es un excelente especialista, se dedicó tanto a la especialidad que aspectos básicos se perdieron en sus labores de día a día en los hospitales de primer nivel.
Conocemos los relatos de varios hospitales que en esta pandemia, sobre todo al inicio, se vieron escasos de médicos generales e internistas, y al intentar solicitarle a especialistas la ayuda, muchos de ellos, aún con la mejor voluntad, su colaboración no fue práctica, puesto que conocimientos básicos como por ejemplo, hidratación intravenosa, manejo de líquidos, lectura de gases arteriales, auscultar el aparato respiratorio. Explico de forma que cualquier lector pueda entender, con ese aparatico que parece una Y se nos ve colgar a los médicos del cuello, poder escuchar la inspiración y espiración del aire.
El mes pasado a mi consulta me llega un paciente de 55 años con una queja de dolores musculares, en las articulaciones y…
-Doctor, estoy muy cansado, todo me pesa y no tengo ánimos ni de morirme. Además esta dermatitis me tiene aburrido y el único consuelo es rascarme.
En el viaje a Bogotá, fue a consulta por cardiología, reumatología, ortopedia, endocrinología, dermatología, y alguno de esos especialista lo remitió a psiquiatría y a fisioterapia.
Para no ser monótono con la medicina, la verdad es que tenía una fórmula médica que parecía una receta de las abuelas para hacer galletas de avena. Con tantas cosas y aliños que lo menos importante era la avena. Al sumar las fórmulas, ese paciente tomaba 12 medicamentos.
Se me olvidaba decirles, como éste paciente tiene una buena condición económica, consultó por fuera del plan de medicina prepagada a un médico naturista que le formuló 3 medicamentos más y lo remitió, debido a los dolores musculares, a secciones de acupuntura.
La verdad, estas anécdotas que pasan con sus padres, tíos, amigos, conocidos, y no se resumen a pacientes mayores de 50 años, hoy lo vemos con pacientes de 35, 40 años, sucede como un paseo millonario en la medicina actual. Me pregunto si algún sistema, aún en países económicamente fuertes, podrá aguantar tamaña correría de especialidades médicas. Sin dejar de preocuparnos si esa atomización médica entre las especialidades nos obligará a una nueva especialidad.
El médico general actual, no podría ser, y aunque me partan rayos, el médico general de hoy en día, en la mayoría de las veces, como lo dicen mis pacientes: -Doctor, esos médicos generales de las EPS son para recetar acetaminofén y para remitirlo a uno al especialista, para nada más.
Y, como siempre copiamos y copiamos mal e introducimos otro especialista: el médico familiar, medicina de família. A la hora de la verdad lo que debe ser el médico general colombiano, adaptado a nuestra realidad.
Es imposible un Galeno que tenga el dominio de todas las áreas del conocimiento médico. Pero es posible incentivar un conocimiento integral en los médicos generales. Los especialistas son importantes e indiscutible es la realidad de un médico que centra todo su conocimiento y habilidades a un área específica, mas esto no puede desconocer que es necesario y de suma trascendencia la existencia de médicos que puedan tener una visión integral del paciente y su entorno y que por ello sean recompensados y reconocidos.
No hay sistema económico que aguante, ni pacientes que lo resistan, si seguimos el paseo millonario por las especialidades.



