Cuando conocemos a una persona que nos atrae comienza la etapa del enamoramiento, ese estado maravilloso que casi todos hemos experimentado en el que sentimos mariposas en el estómago, el mundo parece bello, estamos alegres, deseamos tener cerca a esa persona a toda hora y cada día queremos conocerla más.
Estos sentimientos se deben a una reacción química que produce nuestro cerebro y se llama dopamina, que es la hormona encargada de producir estas sensaciones. El enamoramiento envuelve un rápido amor pasional que tiene una duración aproximada de seis a ocho meses.
Luego, llega el amor que aparece cuando conoces a una persona profundamente y la aceptas con sus cosas buenas y malas. Tomas la decisión de amarla y deseas que esté contigo por el resto de la vida…
Inician un matrimonio con nuevas costumbres y hábitos que los fortalecen y consolidan como pareja. Contrario a lo que muchos creen, es importante tener en cuenta que la rutina no es la que mata el amor; el amor muere cuando la pareja permite que la rutina se convierta en aburrimiento.
El aburrimiento en una pareja parte de una mala comunicación que se hace evidente cuando aparecen los largos silencios compartidos. Cada uno se centra en sus propios intereses y dejan de pensar en un nosotros, creando un individualismo con el cual asoma la primera fractura del amor.
Y si a los silencios compartidos le sumamos los problemas laborales, las dificultades económicas, las responsabilidades domésticas, los niños, la mascota, la pandemia… es posible que están en una relación con “pronóstico reservado”.
Es necesario que la pareja proyecte su futuro y estabilidad, pero si no programan cosas nuevas y dejan de lado las expresiones de cariño, los reconocimientos y los cumplidos compartidos, la muerte del amor es inminente.
Es el momento de preguntarte: ¿Hace cuánto que tuve el último encuentro romántico con mi pareja? ¿Le recuerdo lo linda o atractivo que está? Y ¿Cómo son los encuentros sexuales? ¿Tu relación se está convirtiendo más en una relación de amistad? ¿Buscas avivar la pasión durante la intimidad?
La rutina sexual es algo que se puede, y se debe evitar si no queremos que la relación con nuestra pareja termine por convertirse en una relación de amistad. ¿Buscas una buena comunicación? ¿Muestras un genuino interés en las actividades y sentimientos de tu pareja?
¿Le demuestras un genuino interés en avivar la pasión durante en la intimidad? ¿Solo utilizas la tecnología para hablar de pagos y problemas? ¿Le envías mensajes con los cuales le demuestras tu amor, pasión y deseo?
Busquen unas vacaciones solitos para que pasen algunos días al año gozando de las mieles del amor, lejos de la casa, sin niños… Eso días juntos les van a conectar nuevamente, consiéntanse mutuamente y recuerden los motivos por los que decidieron pasar su vida juntos…
Regalar sexo especial es más que un obsequio. Es la capacidad de expresar sentimientos y emociones profundas mediante la exploración de parajes desconocidos del cuerpo del ser amado que, guiados por la brújula del amor, le permitirán a la imaginación volar hasta alcanzar el verdadero placer.
Tal como lo describe Octavio Paz: “La imaginación vuelve palpables los fantasmas del deseo” Solo entonces descubriremos que la música está en nosotros mismos y es con sus notas de excitación que podremos encontrar el canto de la pasión que nos transportará a los verdaderos conciertos del deseo, que habitan en el manantial de nuestra piel.