En días pasados el presidente Gustavo Petro ordenó que maquinarias usadas para minería ilegal fueran quemadas por la fuerza pública y hasta el día de hoy ya van 7 de estas máquinas destruidas, lo que me parece lamentable no por quitársela a los ilegales, sino por no entregárselas a las Juntas de Acción Comunal así como piensa hacer con las vías terciarias en el país, que usted manifestó, serian contratadas por estas juntas
¿Se imagina que no harían estás, con esas importantes herramientas, a las que históricamente nuestros Campesinos, nunca han tenido acceso y que viven suplicando a los administradores de turno?
Cuenta la leyenda que hace más de 70 años, «la gota que rebozo la copa», para que alias «Tirofijo» excomandante de las FARC, tomara las armas, fue la negación de un expresidente de Colombia, a la solicitud de este, al arreglo de vías de difícil acceso, donde él y otros campesinos cultivaban la tierra, lo que les impedía el transporte de los productos cosechados. No quiero decir con esto que justifique las razones o acciones que tuvo para alzarse en armas, sino, recordar que la falta de necesarias herramientas, es tan antigua, cómo el problema de la tenencia de la Tierra.
La compra de maquinarias pesadas, por parte de las administraciones, para supuestos arreglos de vía, reparación de rupturas, por dónde entran aguas provenientes de ríos y otros caudales en tiempos de invierno, preparar la tierra al campesino, entre otras justificaciónes, terminan generalmente en actos de corrupción por los sobrecostos y maquinarias en mal estado, muchas usadas, hasta averiadas, haciéndolas pasar como nuevas; entonces con esta medida se evitaría está situación, sería mucha la maquinaria que quedaría en manos del campesinado, ya que para nadie es un secreto que la minería ilegal se practica en casi todo el país, pues Colombia está bañada de este a oeste y de norte a sur, por múltiples ríos y en estos, los grupos al margen de la ley, practican la minería ilegal.
Con la quema de esta importante maquinaria, se castiga más al campesino que a quienes la usan de manera ilegal, quien ve como se desperdicia una herramienta, muy importante para ellos, por la que siempre le suplican a las administraciones, que le envíen a sus territorios para reparación de vías, rupturas por corrientes hídricas, construcción de represas, pozos y preparación de la tierra para cultivos, entre otras necesidades.
Así que respetado presidente, usted que es un hombre inteligente y práctico, pero que quizás por tantas obligaciones no se ha percatado que esa maquinaria, por lo anteriormente explicado es una herramienta muy útil en manos del campesino, que no vale la pena quemar a la orilla de nuestros ríos, dónde también terminan convirtiéndose en un objeto obstructivo y contaminante del ambiente.