Tras conocerse una denuncia por acoso sexual a una estudiante, el pasado 9 de noviembre por parte de su progenitora, fue capturado un profesor de música señalado de hacerles tocamientos a varias estudiantes a quienes les ofrecía dinero.
Los aberrantes casos se conocieron cuando la madre de la menor revisó el teléfono celular de su hija, y encontró en el chat una conversación con el docente, donde le mencionaba encuentros privados y pagos de dinero para que accediera a sus peticiones sexuales.
Una vez conocidos estos hechos las autoridades activaron la ruta de atención para el restablecimiento de derechos con el apoyo de la comisaría de familia y la Fiscalía General de la Nación, iniciando las labores investigativas que permitieron realizar entrevistas forenses, inspección al lugar de los hechos entre otros, logrando recolectar importante material probatorio.
Durante las actividades de Policía Judicial, se logró conocer que el docente de 48 años de edad encargado de dictar la clase de música en una Institución del departamento de Caldas les decía a sus alumnas que se dejaran tocar o que lo miraran tocándose los genitales.
La indignación creció cuando se puso en conocimiento de los directivos del plantel educativo lo sucedido, y se activó una ruta de atención que permitió conocer que al menos seis menores más de la Institución entre 13 y 16 años, habrían sido víctima de actos y acoso sexual por parte del maestro, quien aprovechaba las clases en la caseta comunal de la vereda San Isidro para cometer sus aberraciones sexuales.
Ante la contundencia de los elementos materiales probatorios, el Juzgado Primero Promiscuo Municipal de Belalcázar, Caldas, emitió la orden de captura, la cual se materializó en Pereira Risaralda, hasta donde llegó un grupo de uniformados de la Seccional de Investigación Criminal Caldas.
El profesor fue presentado ante la Fiscalía General de la Nación, por los presuntos delitos de explotación sexual comercial de persona menor de 18 años, actos sexuales con menor de 14 años y acoso sexual. Durante la audiencia el profesor no aceptó los cargos y fue cobijado con medida de aseguramiento intramural en centro carcelario.
Los delitos sexuales son unos de los más difíciles de demostrar, pues muchos de los acosadores tratan de no dejar rastros. Manipular a menores de edad que superen los 14 años para luego decir que todo fue con su consentimiento, y a los más pequeños los abusan con tocamientos, besos y otros tipos de vejámenes que no dejan mayor huella pero que los complace en sus fetiches mientras acaban con la inocencia de sus estudiantes y víctimas.