La Policía Nacional frustró un intento de envío masivo de cocaína hacia Europa desde el puerto de Cartagena de Indias. La droga, camuflada hábilmente en 2.1 toneladas de carbonato de calcio y latas de piñas en almíbar, estaba a punto de ser despachada con destino a diferentes puntos del continente europeo.
El golpe a las redes de narcotráfico se materializó gracias a los rigurosos controles implementados por la Dirección de Antinarcóticos, quienes, mediante la perfilación de cargas en los puertos marítimos del país, detectaron inconsistencias en la documentación de una empresa que pretendía enviar 18 toneladas de carbonato de calcio a Valencia, España.
La alerta generada por estas irregularidades desencadenó una rápida respuesta de antinarcóticos, que intensificaron la vigilancia en el Puerto de Cartagena. Con la ayuda de avanzados recursos tecnológicos y la experticia de unidades caninas, se logró identificar la presencia de clorhidrato de cocaína oculta en el interior de los contenedores.
En un primer hallazgo, se descubrió la droga mezclada con el carbonato de calcio, arrojando un peso neto de 298 kilos de cocaína. En un segundo caso, durante la inspección de un cargamento de latas de piñas en almíbar con destino a Rotterdam, se encontraron 1.831 kilos adicionales de la sustancia ilícita.
Se estima que el valor de la droga incautada asciende a aproximadamente 126 millones de dólares en el mercado europeo, lo que representa un duro golpe a las finanzas de las organizaciones criminales dedicadas al tráfico de drogas. Además, esta operación ha evitado la distribución de alrededor de 5 millones de dosis, contribuyendo así a la protección de la salud pública.
En lo que va del año, la Policía Nacional ha logrado decomisar más de 122 toneladas de clorhidrato de cocaína, evidenciando su compromiso continuo en la lucha contra el narcotráfico.
