Tras las recientes protestas en la Troncal de Occidente, el Ministerio de Transporte extendió la exoneración del pago en el peaje de Turbaco, Bolívar para vehículos de categorías I y II hasta el 26 de agosto. Esta medida se implementó como una respuesta inmediata a las demandas de la comunidad local, que ha manifestado su descontento con el cobro en esta caseta, situada a solo cinco minutos de Cartagena de Indias.
Según la resolución del Ministerio de Transporte, los vehículos tipo sedán y los buses de servicio público no deberán pagar al transitar por este peaje durante el próximo mes. Esta prórroga se mantendrá mientras se socializa con la comunidad los resultados del censo realizado por la concesión Autopistas del Caribe. Este censo es crucial, ya que definirá quiénes serán los beneficiarios de una tarifa diferencial para los vehículos de categorías I y II.
A pesar de la prórroga, la comunidad local sigue firme en su exigencia de desmontar definitivamente la caseta de peaje. «Estamos todos los movimientos antipeaje unidos para lograr el único objetivo que es el desmonte del peaje de Turbaco. Hacemos un llamado al Ministerio de Transporte y la ANI a que entiendan que el pueblo no va a aceptar que continúe esta caseta porque nos afecta económicamente. Estamos dispuestos a dar la batalla durante todo el tiempo que nos toque luchar», expresó Jeison Laso, líder del comité Turbaco Libre.
El Ministerio de Transporte ha propuesto una resolución para implementar una tarifa diferencial que busca mitigar el impacto económico en los residentes de la zona. Las tarifas propuestas son las siguientes:
Vehículos de servicio particular: $1.500 para aquellos cuyos propietarios o arrendatarios transiten frecuentemente por el peaje y sean residentes de los municipios de Turbaco o Arjona.
Buses, busetas y microbuses: $2.000 para los autorizados para la prestación del servicio público de transporte en las rutas Turbaco-Arjona y viceversa.
Mientras se espera la implementación de estas tarifas diferenciales y la socialización del censo, la comunidad de Turbaco y sus alrededores continúa presionando por una solución definitiva. La prórroga de la exoneración del pago en el peaje es vista como un alivio temporal, pero no satisface la demanda principal de los residentes: el desmonte total de la caseta.
La situación actual refleja una tensión constante entre las autoridades y la comunidad, que busca proteger su economía local y mejorar su calidad de vida. El Ministerio de Transporte y la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) tienen la tarea de encontrar un equilibrio que satisfaga a todas las partes involucradas.
Con esta extensión de la exoneración hasta el 26 de agosto, queda por ver si se logrará una solución que aborde las preocupaciones de la comunidad de manera más permanente y equitativa.