En un acto oficial celebrado en el emblemático Palacio de La Aduana, el gobierno de Italia formalizó la entrega de una donación de 3 millones de euros a la Alcaldía de Cartagena, marcando la cooperación internacional más significativa en la historia reciente de la ciudad para la preservación del patrimonio, el fomento del turismo sostenible y el fortalecimiento de la economía popular.
El evento contó con la participación del alcalde Dumek Turbay y el embajador de Italia en Colombia, Giancarlo María Curcio, quienes presentaron los proyectos prioritarios que se implementarán con estos recursos. Uno de los más destacados es el programa para fortalecer la economía popular en el Centro Histórico, con un enfoque en dignificar las condiciones laborales de los vendedores tradicionales.
Con los fondos aportados, el Distrito dotará a 74 vendedores populares, ubicados en la Calle de Ronda, la Plaza de Las Armas y el entorno del Museo Naval, de nuevos y modernos puestos de trabajo. Esta intervención incluye artesanos, vendedores de frutas y de agua de coco, quienes además participarán en procesos de formación integral que buscan mejorar sus capacidades comerciales, administrativas y turísticas.
La economía de Cartagena se apoya en gran medida en el turismo, lo que ha generado una alta dependencia de esta actividad, afectando la diversificación económica de la ciudad. Además, la informalidad laboral es un problema crítico: un estudio del Banco de la República indica que cerca del 60% de los empleos en la Heroica son informales, lo que implica condiciones laborales inadecuadas para una gran parte de la población.
En respuesta a esta problemática, el programa tiene como objetivo mejorar las condiciones laborales y fortalecer el sector turístico desde una perspectiva inclusiva y equitativa. El Distrito busca promover el empleo digno, especialmente para mujeres y jóvenes, fomentando la equidad económica y social en el marco de una economía popular sostenible.
“La cooperación de Italia representa un hito para nuestra ciudad. Estos recursos nos permitirán no solo preservar nuestro patrimonio y promover un turismo sostenible, sino también transformar la vida de nuestros vendedores tradicionales, quienes son una parte esencial de la identidad cultural y económica de Cartagena”, destacó el alcalde Turbay.
La iniciativa es un paso importante hacia una Cartagena más justa y sostenible, donde la economía popular sea un motor de desarrollo digno y respetuoso de las tradiciones culturales que caracterizan a la ciudad.