El titulo de esta columna es del «fulminante» trino del ex vicepresidente de la República Francisco Santos, el 6 de julio de 2022, referente a la tragedia que vive la Mojana sucreña con la implacable inundación. No podemos acostumbrarnos a ella. Al menos yo no lo haré.
No hay día que no pare de llover en la región, las aguas creciendo, y los damnificados también, porque la inundación se muestra más implacable, al extremo que se metió en el propio San Marcos, en sitios donde hace «siglos» no eran afectados por la creciente. A todas estas «el gobernador Héctor Olimpo, desaparecido, no hay derecho, como se lo restregó en su cara el ex embajador Francisco Santos.
El show de Héctor Olimpo continua. Es mentira que están atendiendo debidamente la emergencia. La comunidad de El Limón en San Benito, ha sido una de las tantas que lo desmintió en la entrega de mercados y otros. En sus publicaciones la Gobernación monta una parafernalia que quienes no lo conocen lo postulan para un nobel. Habló de la entrega de doscientas mil ayudas; quien sabe cuales y de que ¡Cuán farsante!
La Mojana se sigue ahogando en agua y hambre. No los están atendiendo. Los ignoran y en la Gobernación de Sucre, con sus actos se burlan de ellos. Nosotros seguiremos firmes en esta denuncia. Los responsables de atender la emergencia fueron alertados con tiempo, por lo menos para mitigar el hambre y no hicieron nada. Hoy quizás están en tramitologia que si hubieran atendido el llamado a tiempo, eso estuviera superado y la gente básicamente atendida.
Desde esta humilde columna se hace un llamado al señor secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres para que brinde una mano en esta tragedia de imágenes mundial, en la que el mandatario departamental de Sucre, Héctor Olimpo, ha sido insensible, con irrespeto sin igual, al dolor de los niños mojaneros, por nombrarlos solo a ellos. Si lo que están viendo es como se roban lo insuficientemente asignado, si es que asignaron algo, no extraña, ya lo intentaron con descaro en la pandemia.
Conclusión a la Mojana sucreña no le han llevado al día de hoy nada. Nada es nada, porque una papeleta de café no sirve sino para la foto y espectacularidad bellaca de Héctor. En la gobernación de Sucre hay ríos de dinero; esperan más por todos los conceptos, que han servido para pagar campañas, de las cuales «Emilio» no tiene la culpa que el sapo se ensarte en la estaca y con la muerte de los mojaneros y hasta sucreños en general se engorden cuentas y nadie diga nada. Corrobora Francisco Santos la maldad ante la tragedia: «Y el gobernador desaparecido. No hay derecho «.
Presidente Petro ojo con el CONPES 4076 y los 2.5 billones de pesos para la mojana, que no caigan en manos de Héctor Olimpo.