La situación en la carretera Troncal de Occidente, a la altura del peaje del municipio de Turbaco, Bolívar se torna crítica. Centenares de personas se han apostado en una cadena humana en plena caseta de peaje, impidiendo el paso de cualquier tipo de vehículo. La protesta ha generado un caos en el tráfico, afectando tanto a transportadores como a viajeros que se encuentran atrapados en la zona.
Los manifestantes, encabezados por los Comités Anti Peajes de Turbaco, han dejado claro que no se moverán hasta que el ministro de Transporte, William Camargo, se presente en el lugar con una decisión definitiva sobre el futuro del peaje. «No más casetas ni reubicación del peaje», es el clamor unánime de los protestantes, quienes aseguran que la presencia del alto funcionario es indispensable para resolver la situación. La presencia de las autoridades es mínima, lo que incrementa la sensación de incertidumbre y peligro entre los presentes.
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La comunidad y los viajeros afectados hacen un llamado urgente al gobierno nacional para que atienda esta problemática y evite que la situación escale a niveles más críticos. La expectativa es alta y el reloj corre. ¿Responderá el ministro a este llamado de emergencia? La respuesta se espera con gran ansiedad en medio de una tensa situación sobre la Troncal de Occidente.
